Hoy es día de las madres y no puedo dejar de hacer una mención especial a ese ser que me dio la vida: mi hermosa madre.
Dicen que madre hay una sola, pero un día como hoy, recuerdo a mi segunda madre, que es más bien la primera, por que fue base, fue raíz, fue cimiente: mi amada abuela.
Mi deseo es que todos valoren y cuiden a la mujer que primero sueña y anhela ser madre, para la que a veces (como a mi) no le es tan fácil y hace (hacemos) todo lo humanamente posible y recurrimos a lo más divino y hasta inhumano, en busca de la maternidad.
Felicidades a todas las madres que no solo nos llevaron en sus vientres, si no que se desvelaron cuando teníamos fiebre, que disfrutaron y festejaron con nosotros cada logro (por más pequeñito que lo viéramos), esa madre que nos aconsejó, que nos castigó, que nos besó, que celebró "por" nosotras nuestra primera menstruación y se lo contó a todo el mundo.
Gracias Dios por darnos este sentimiento, por poner en nuestros corazones ese amor tan sublime.
Hoy mi oración es por aquellas que no hemos podido ser objeto de este amor; que Dios satisfaga nuestros corazones y que nos de el tan preciado fruto del vientre y/o nos de consolación en el proceso.
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